El viento viene del mar,
Y mientras ruge al pasar
Me deja un gusto salobre.
La noche vuelve otra vez, buscándote,
Mi musa pobre.
Supimos ir vos y yo,
Con poca ropa y sin pan
Bebiendo vinos de sol,
Los dos
Pidiendo a Dios salvar,
Tu triste vida, que después
Se deshojo en el mar.
Nunca, nunca más tu voz,
Y nunca más tu amor
Me arrancarán este martirio.
Tanta dicha y tanto bien,
Y yo, cobarde, sin poder
Salvar tu vida del suicidio.
Fui mil veces a buscar
Tu voz más allá del mar
Y aún más allá de mi delirio.
Rocas… Playas… Murallón
…y nunca, nunca más tu amor.
Testo: Leopoldo Díaz Vélez Musica: Francisco Pracánico Registrato da María José Mentana con accompagnamento d'orchestra. (si ringrazia per la collaborazione l'amico Carlos Isidro Giménez,02-2014).