Cuando pienso que la vida me negó la gran fortuna
Que es tener una viejita, que es vivir en un hogar,
Como gotas de veneno, se me filtran una a una
Las ideas más amargas hasta hacerme lagrimear.
Yo no tuve de una madre ni caricias ni reproche
Ni el aliento confortante que ellas dan para luchar,
Sólo tengo la tristeza, compañera de mis noches
Fiel amiga del que sufre sin poderse consolar.
El dolor del infortunio mi carácter hizo huraño
No me interesó el amigo, ni me interesó el amor,
Vivo solo mi desgracia, soy el fruto de un engaño
Y en mis venas corre sangre de vergüenza y de rencor.
No llegué, como otros llegan, como bendición del cielo
Yo llegué como una carga que se deja en un portal,
Una carga que se esconde porque trae el desconsuelo
Montoncito de esperanzas castigado por el mal.
Desde pibe me dejaron encerrado en un colegio
Y una infancia desolada con extraños me pasé,
Pero un día me hice hombre, por un raro sortilegio
Y salí a buscar la vida, pero nunca la encontré.
Porque, vida son los seres más queridos de la tierra
Porque, vida son las cosas que yo nunca conocí,
Y al pensar que yo soy… Nadie… una angustia cruel me aterra
Que me hiere, que me mata, como un mal que vive en mí.
Testo e Musica: Enrique Domingo Marano, Carlos Marano e Antonio Marano